jueves, 12 de septiembre de 2013

Ex becada de CFCA en Guatemala mira hacia atrás con alegría




Carmen, ex becada en CFCA Guatemala, recuerda las luchas que pasó para alcanzar su sueño de graduarse del diversificado. Ella comenzó su propio negocio en la escuela para proporcionar un ingreso extra para su familia.

Mi nombre es Carmen.

Tengo 18 años y tengo siete hermanos.

Este año me gradué del diversificado como Secretaria bilingüe. Fue un gran logro para mí y mi familia.

CFCA me dio una beca cuando estaba en segundo básico. Tenía 13 años y asistía una escuela pública en mi pueblo de Chipiacul, Guatemala.

Puedo decir honestamente que la beca hizo toda la diferencia para mí porque mis padres no podían pagar mis gastos escolares.

Agradezco a CFCA por esta gran experiencia. Yo tuve la oportunidad de interactuar con otros becados y niños apadrinados.

Tuve la oportunidad de ayudar a los niños más pequeños que estaban teniendo problemas con su clase de matemáticas.

Nos hicimos buenos amigos, y jugamos y reímos juntos.

En tercero básico, la beca ayudó a pagar mi mensualidad y clase de computación.

CFCA me dio otra oportunidad cuando me ayudaron a empezar mi propio negocio pequeño criando pollos.
Fue genial porque yo era capaz de obtener un ingreso extra.

Vendí la carne y los huevos, y con las ganancias pude pagar mis gastos de transporte a la escuela.

Entré en el diversificado en 2009, tuve que dejar mi pueblo para estudiar en una ciudad más grande, y una vez más, mi beca fue vital para pagar los gastos de vivienda.

Volvía a casa los fines de semana y mi negocio de pollos seguía prosperando.

Gracias a Dios porque ahora me he graduado del diversificado.

El programa de becas de CFCA lo hizo posible.

Como becarios, CFCA nos educó en temas como el SIDA, enfermedades de transmisión sexual, embarazos, autoestima, liderazgo, respeto, solidaridad y honestidad para mencionar unos pocos.

También hemos aprendido sobre el reciclaje, hicimos un sofá con botellas de plástico recicladas.


Como becada en CFCA, Carmen aprendió la importancia del reciclaje. Los becados de CFCA hicieron esta sala de de botellas de plástico recicladas.

Aprendimos cómo hacer donuts, jaleas, aretes, collares y cómo cultivar frutas y verduras.

Fui becada durante cinco años y todo lo que puedo decir es gracias; Gracias por haberme ayudado a alcanzar este sueño.

Agradezco a Dios y a mis padres por todo su amor, que Dios bendiga a todos nosotros.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Una feria en Guatemala


Publicado el 26 de agosto de 2013



Durante el verano, surgen varios festivales y ferias en todo el mundo ofreciendo deliciosos bocadillos, juegos, entretenimiento y más.

La historia no es diferente en Guatemala, donde las familias de los niños apadrinados se juntan una vez al año para la celebración anual del día de mercado de CFCA.

En 2011 se organizó el primer día de mercado como una forma de apoyar las iniciativas de medios de subsistencia de las familias.

Josefina Poz, de CFCA-Guatemala, presenció la relación y el apoyo de aquellos en el programa de apadrinamiento y de las personas de la comunidad en esa primera edición, y el mismo espíritu continúa hoy en día.

"Nuestra idea era proporcionar una oportunidad para que las familias de CFCA pudieran promocionar sus productos y venderlos", dijo Josefina.

"Queremos que este mercado fortalezca las relaciones para construir un sentido de solidaridad dentro de la comunidad, y queremos pasar un buen rato".

Unos 200 amigos apadrinados y sus familias llegaron a vender sus productos y unas 600 personas de la comunidad llegaron a comprar artículos en el mercado CFCA 2013.

Las familias venden de todo, desde bocadillos y bebidas, hasta frutas, vegetales y animales de granja.

Todo el mundo espera este día porque pueden vender los artículos que han sembrado, criado o creado, y también pueden comprar artículos a precios reducidos.

Thelma ha participado en los eventos del día de mercado desde el principio. Su hija Darlin, lleva 10 años en el programa de patrocinio.

"Me encanta la fraternidad y la atmósfera alegre del mercado", dijo Thelma. "Me gusta que nos estamos ayudando mutuamente al comprar y vender artículos a muy buenos precios.

"He comprado un gallo, y pague $7.50. Es genial porque normalmente pagaría $9.50 por un gallo como éste. Estos precios ayudan a familias de CFCA y también a las que no son de CFCA. Es un gran beneficio para todo el pueblo".

Thelma y su hija, junto con varios estudiantes becados de CFCA, decidieron hacer deliciosos tamalitos para vender al público.



"El primer año vendí sopa de pollo, el segundo año vendí pollos vivos y este año estoy ayudando a mi hija a vender tamalitos", dijo Thelma.

"Estoy agradecida con CFCA porque constantemente nos traen nuevas ideas. Nos entrenan, nos animan y nos ayudan a encontrar nuevas formas para mantener a nuestra familia".

La parte más impresionante del día de mercado de CFCA es que está organizado y planeado por los apadrinados de CFCA y sus familias.

Josefina y otros empleados de CFCA-Guatemala ayudan a las familias mediante el envío de cartas para los permisos de las autoridades locales, pero la mayor parte de la planificación y ejecución es realizada por las familias.

"Las familias arreglan sus puestos de venta, y se encargan de la música, las representaciones culturales, la basura y otros detalles. Los equipos de CFCA solo llegan para apoyar la acción,", dijo Josefina.

Para Thelma y otros padres de niños apadrinados, el día de mercado es una oportunidad para mostrar lo que han logrado con el aliento y el apoyo que reciben como miembros de CFCA.


Thelma y su hija disfrutan los frutos de su trabajo – deliciosos tamalitos.

"Al principio era muy tímida y no era una muy buena vendedora," Thelma se rió.

A través de su participación con CFCA, ella superó su naturaleza tímida y ahora está orgullosa de sus habilidades de ventas.

"En casa tengo pollos, gallinas y pavos. También cultivo maíz, güicoy y cilantro. ¡Y usted está invitado a venir a mi casa porque hacemos y vendemos la mejor sopa de pollo del pueblo!"